“Si crees que vas a crear una empresa porque es una buena forma de ganar mucho dinero, te estás equivocando. […] Creo que la mejor razón para crear una empresa es porque quieres cambiar el mundo, aunque sea un poco.”
Esta frase es de Phil Libin, exCEO de Evernote. Y es una frase que refleja muy bien la idea que queremos transmitirte en este post:
Para emprender no basta con tener una gran idea ni ser muy bueno en lo que haces.
Todo eso es importante, pero necesitas un ingrediente más: tener la mentalidad adecuada para alcanzar el éxito.
Tus valores, tus creencias, tu manera particular de ver el mundo; todo eso va a influir en que consigas hacer crecer tu negocio y alcanzar tu meta.
Esos valores son la brújula que te guía a la hora de tomar decisiones y de afrontar los retos que te encuentres por el camino.
Y ¿sabes qué?
Que hay ciertos valores comunes entre la inmensa mayoría de los emprendedores que han tenido éxito con sus proyectos. 😉
¿Quieres saber cuáles son?
Pues sigue leyendo, que te los contamos.
Índice de contenidos del artículo:
✅ Valores de un emprendedor: los 8 que debes cultivar para triunfar con tu proyecto
Antes de seguir leyendo, es importante que tengas esto en cuenta.
Para tener éxito como emprendedor no necesitas poseer estos valores de manera “innata”.
En muchos casos son cualidades que se pueden adquirir y potenciar. Así que no te preocupes si ahora sientes que te falta alguna de ellas, porque con toda seguridad las desarrollarás de forma natural a lo largo del camino.
Así que, ¿preparado para empezar a caminar? 😉
👉 1. Tu profesión también es tu pasión
Antes de embarcarte en un negocio, hay dos preguntas que siempre deberías hacerte:
“¿Quiero dedicarme a esto el resto de mi vida? ¿Es algo que haría incluso si no me pagaran por ello?”.
Si la respuesta a ambas preguntas es un “Sí”, entonces vas en la dirección adecuada.
Un emprendedor debe sentir pasión por lo que hace. Es esa pasión la que te va a empujar a seguir aprendiendo y a superar los retos que te vengan.
Por ejemplo, imagina que has trabajado toda tu vida en el sector de las finanzas. Es un mundo que no te gusta demasiado pero, como ya tienes experiencia en él, has decidido lanzarte como asesor freelance.
Esto sería un error.
Como no es algo que te llena, lo más probable es que acabes haciéndolo a desgana.
Y eso significa que, en los momentos clave (cuando las cosas se pongan complicadas) te faltará la motivación necesaria para seguir adelante.
En estos casos, vale más la pena reinventarte profesionalmente y emprender en un área en la que no tengas experiencia pero que te motive a aprender.
👉 2. Sientes un deseo infinito de ayudar a otros
Esto está muy ligado a la cita de Phil Libin con la que abrimos el post.
Si algo tienen en común la inmensa mayoría de los emprendedores de éxito, es esto: cuando decidieron emprender, lo hicieron para sentirse realizados, pero también con el propósito de ayudar a otras personas.
Y es que el objetivo de una empresa es esa: ayudar a sus clientes a alcanzar sus objetivos.
Piensa, por ejemplo, en el caso del Optimizer Manager. Un profesional que diseña estrategias de captación online para negocios.
O dicho de otra forma: su papel es ayudar a los dueños de esos negocios a conseguir clientes y a crecer.
👉 3. Tienes ambición
Un emprendedor es una persona que siempre quiere más. Conquistar cimas más altas, enfrentarse a retos más complicados.
Por ejemplo, puede que tu objetivo sea:
- Aumentar tu facturación año tras año.
- Potenciar tu marca personal, ganar reconocimiento en tu sector y convertirte en un referente.
- Llegar a un mayor público para poder ayudar a más personas.
- Ofrecer un servicio cada vez mejor.
Esa ambición es fundamental, porque te mantiene siempre alerta frente a nuevas oportunidades de crecimiento.
👉 4. Valoras la honestidad (y la pones en práctica)
La confianza es la base de un negocio.
Y para que tus clientes confíen en ti, debes ser totalmente honesto y transparente con ellos.
“No hay problema, yo soy una persona que va siempre por la verdad por delante. Odio las mentiras”.
Ojo, porque esto puede ser más difícil de lo que parece.
Por ejemplo, cuando:
- Un posible cliente te pregunta cuánto tiempo va a tardar su web en llegar a los primeros puestos de Google, algo imposible de predecir con seguridad… pero temes que, si se lo dices, se vaya a la competencia.
- Has cometido un error y te da miedo que el cliente se enfade.
En estos momentos es cuando de verdad se pone a prueba tu honestidad como profesional.
Ser sincero en estos casos no resulta fácil… pero es totalmente fundamental.
Si tus clientes ven que eres capaz de aceptar tus errores, y de decirles la verdad para que no se creen falsas expectativas, eso hará que su confianza en ti se multiplique.
👉 5. Eres capaz de abrazar tus miedos y no dejar que te bloqueen
Seguro que has oído mil veces eso de: “Un buen emprendedor no tiene miedo de nada”.
Pues es un mito como una casa de grande.
Cualquier persona que haya estado al frente de su propio negocio te dirá que el miedo siempre va a estar ahí.
Por mucho tiempo que lleves, es imposible evitar que te asalten ideas como:
- ¿Y si no consigo clientes el próximo mes?
- Ya le he enviado el proyecto a este cliente, pero ¿y si no le gusta?
- Creo que ha llegado el momento de delegar, pero ¿y si no sé cómo gestionar un equipo?
Eso es algo por lo que nosotros hemos pasado, así que te lo contamos de primera mano.
Y es normal.
Los emprendedores tienen miedo, como cualquier otra persona. La diferencia es que ellos abrazan sus miedos, los aceptan como un compañero de viaje y siguen avanzando hacia su meta.
👉 6. Sientes curiosidad y mantienes la mente abierta
Dos palabras: reciclaje continuo.
Todos los sectores cambian y evolucionan. Y cuando tú eres la persona al frente de un negocio, necesitas tener los 5 sentidos puestos en esos cambios para no quedarte atrás.
Por ejemplo, nosotros trabajamos en el ámbito del marketing digital, que es un mundo que cambia a toda velocidad. Por eso siempre estamos aprendiendo sobre:
- Nuevas prácticas de SEO, publicidad online…
- Nuevas estrategias online.
- Nuevas herramientas.
- Etc.
Y no solo eso.
Además, como dueño de una empresa también tienes que aprender sobre un montón de materias: ventas, atención al cliente, unas mínimas bases de contabilidad…
Por eso, uno de los mayores errores que puedes cometer al emprender (y este sí es de los graves) es pensar: “Ya sé todo lo que me hace falta, no necesito aprender nada nuevo”.
👉 7. Te adaptas a lo que viene (resiliencia)
Dirigir un negocio propio conlleva siempre un cierto grado de incertidumbre.
Y es que nunca puedes saber con total seguridad:
- Cuánto facturarás el próximo mes.
- Si un cliente intentará regatearte el presupuesto que le acabas de enviar.
- Hasta qué punto tendrá éxito el nuevo servicio o infoproducto que piensas lanzar (por eso siempre hay que validar la idea primero).
Y así un largo etcétera.
Saber que hay tantos factores que escapan de tu control resulta muy estresante.
Por eso, cuando las cosas no salen como esperabas, tienes que ser capaz de:
- Mantener la cabeza fría.
- Analizar la situación para entender qué ha pasado.
- Tomar una decisión (por ejemplo, si tu idea de infoproducto no funciona, tienes que ser capaz de pivotar y adaptarla).
No te preocupes porque esta mentalidad “flexible” será algo que vayas desarrollando con el tiempo.
Nota: aunque la inestabilidad siempre va a estar ahí, una forma de reducirla es generar ingresos recurrentes.
👉 8. Sabes cómo trabajar en equipo
Que seas freelance no significa que estés solo, ni siquiera aunque trabajes por tu cuenta y no tengas socios ni colaboradores fijos.
Y es que para cualquier emprendedor es imprescindible contar con una red de contactos, compuesta por otros emprendedores como tú, con los que puedes:
- Delegar trabajo cuando estás desbordado.
- Colaborar para ofrecer un servicio más completo (ejemplo: un Optimizer Manager puede colaborar con un copywriter que escriba los textos de venta de las webs que diseña).
- Buscar apoyo emocional cuando sientes que los obstáculos te superan.
Tener tu propia red de seguridad es clave. Porque, siempre lo decimos, nadie va a entender lo que implica tener un negocio propio tan bien como otro emprendedor.
✅ ¿Con cuántos de estos valores emprendedores te has sentido reflejado?
Recuerda lo que te decíamos al principio.
Lo importante no es que cumplas todos los puntos de esta lista, porque muchos de estos valores los irás desarrollando a base de experiencia.
Para nosotros, solo hay dos que debes cumplir sí o sí desde el principio si esperas tener éxito:
- Dedicarte a algo que te apasione y que te dé calidad de vida.
- Además, debe ser algo que te permita ayudar a los demás de algún modo.
¿Y tú? ¿Ya has encontrado una idea de negocio que cumple esos dos requisitos?
Si no, nosotros te proponemos una: el Optimizer Manager.
El Optimizer Manager o Experto en Google es un profesional que diseña estrategias de captación de clientes con Google.
Y eso supone una serie de ventajas muy interesantes:
- Vive ayudando a otros negocios a crecer.
- Además, la competencia es muy reducida y hay muchos nichos por explorar.
- Ofrece sus servicios online, así que tiene libertad horaria y geográfica completa.
- Su servicio está muy demandado, lo que te permite generar ingresos altos y tener calidad de vida.
Eso es solo un resumen, pero si quieres saber más, entrando en este enlace puedes apuntarte a la Semana #GánateLaVidaConGoogle.
Un entrenamiento 100 % gratuito donde te explicamos todo sobre esta nueva profesión digital y por qué tiene tantas ventajas para reinventarse.
Ahora mismo las plazas están cerradas, pero a través del enlace puedes apuntarte a la lista de espera para que te avisemos en cuanto volvamos a abrirlas.
¿Listo para dedicarte a algo que te llene? 😉