Si has llegado hasta aquí es porque estás en busca de tu vocación profesional.
Por eso lo primero que queremos decirte es: ¡enhorabuena!
Esto es algo que mucha gente no se plantea nunca. Se acomodan en un trabajo monótono, que no les llena, pero que siguen haciendo en piloto automático durante el resto de su vida.
Tú, sin embargo, te has escuchado.
Sabes que necesitas cambiar algo y estás decidido a encontrar un camino profesional que de verdad te haga sentir realizado.
Pero aquí viene el problema.
Y es que no siempre resulta fácil averiguar qué es ese algo que te apasiona y te hace vibrar.
Si este es tu caso, sigue leyendo, porque aquí te vamos a dar una serie de estrategias que te ayudarán a descubrir tu auténtica vocación.
Y además, para que el post te resulte lo más útil posible, hemos incluido 2 ejercicios con los que podrás poner en práctica lo que vamos a explicarte.
Pero antes de meternos de lleno en materia, tenemos que hacer una paradita rápida…
Índice de contenidos del artículo:
✅ ¿No sabes cómo encontrar tu vocación? Lo primero es romper las falsas creencias que te están bloqueando
Durante mucho tiempo nos han vendido la vocación como un concepto casi místico.
Un día cualquiera te levantas tocado por la gracia divina y, ¡ajá! De repente, ya tienes clarísimo a qué quieres dedicarte el resto de tu vida.
Y claro, cuando ves que pasan los años y que tú todavía no has encontrado la tuya, empiezas a agobiarte. Sientes que te estás quedando atrás y que ya nunca vas a poder dedicarte a algo que te apasione.
Eso hace que te bloquees y que no seas capaz de encontrar tu vocación, incluso aunque la tengas delante de los ojos.
Por eso, lo primero es romper unos cuantos mitos respecto a este tema:
- Si no has encontrado tu vocación antes de los 20, ya vas tarde: rotundamente falso. Hay muchísima gente que no descubre lo que de verdad quiere hacer hasta que tienen 30, 40 o incluso más años, y que aun así son capaces de reinventarse y tener éxito.
- Tu profesión ideal tiene que ser algo «grande»: si tu propósito en la vida no es ser el próximo Steve Jobs, algo estás haciendo mal… pues no. Tu vocación puede ser cualquier trabajo que te haga sentir realizado, aunque no te dé para comprarte un yate.
- La vocación llega por instinto: ¡en absoluto! La mayoría de las veces requiere un trabajo previo. Debes conocerte bien, analizarte y probar cosas. Es más bien un proceso que una epifanía. 😉
¿Ya notas un poco menos de presión?
Perfecto; pues ahora estás preparado para salir en busca de tu verdadero propósito.
✅ 6 consejos para pasar del “No sé cuál es mi vocación profesional” al “Ya sé a qué quiero dedicarme a partir de ahora” (+2 ejercicios prácticos)
Ya lo hemos dicho antes: para encontrar tu vocación, lo primero es conocerte bien y entender qué es lo que te hace vibrar.
Y eso requiere un proceso de autoanálisis.
Coge papel y boli, que te hará falta…
👉 1. ¿Qué se te da bien? ¿Con qué actividades fluyes?
Lo primero es hacer una lluvia de ideas.
Apunta en un papel:
- Tus principales habilidades: tanto a nivel personal como profesional.
- Tus intereses o aficiones: aquellas con las que pierdes la noción del tiempo.
- Sobre qué te gusta aprender en tu tiempo libre: ¿hay algún tema sobre el que no te aburres de leer? ¿Algo sobre lo que hayas hecho incluso formaciones de pago?
Ojo, también puedes retrotraerte a tu infancia y pensar en talentos o aficiones que tenías de pequeño y que dejaste de lado con el paso de los años.
Escribe todo lo que se te ocurra. Aunque ahora no te lo parezca, cualquiera de estas ideas podría ser el germen para descubrir tu vocación profesional.
Y para complementar esta lluvia de ideas…
👉 2. Pregunta a tus conocidos cómo te ven ellos
Es muy probable que los demás vean habilidades en ti que tú ni siquiera habías tenido en cuenta.
Un ejemplo.
Imagina que, entre tus amigos, muchos coinciden en que se te da bien explicar las cosas y que consigues que los conceptos más complicados parezcan sencillos.
Tú nunca te habías parado a pensar en ello pero, a raíz de ese comentario, te das cuenta de que no solo eres bueno enseñando, sino que incluso lo disfrutas.
Así que podrías aprovechar esa habilidad para buscar tu nueva profesión (por ejemplo, creando un curso online sobre algún tema que domines).
👉 3. No tengas miedo a salir de tu zona de confort
¿Por qué ceñirte solo a lo que conoces?
Quizá tu vocación podría ser algo totalmente distinto a lo que has hecho hasta ahora.
Por ejemplo, puede que tú hayas sido toda la vida de letras: estudiaste Filología y has trabajado en una librería hasta ahora.
Pero de pequeño te encantaba sentarte frente al ordenador de tu padre y experimentar con MS DOS (que ya ves tú lo que tenía eso de atractivo…).
En ese caso, ¿no se te ha ocurrido considerar la programación como una posible salida?
Al final es como aprender un idioma… solo que para hablar con los ordenadores. 😉
👉 4. Investiga sobre nuevas profesiones
Al hilo de lo anterior, una buena táctica para salir de lo que conoces es buscar información sobre nuevas profesiones.
En los últimos años (sobre todo al calor del boom de Internet) han nacido perfiles muy diversos que a lo mejor ni sabes que existen, pero que podrían resonar contigo.
Por ejemplo, hace 15 años no existía la figura del analista de datos o del community manager.
NOTA: al final del post te hablamos de una profesión nueva que podría interesarte y que te ofrece muchas ventajas para reinventarte.
👉 5. Habla con profesionales de los sectores que te interesan
Una cosa es cómo se ve un trabajo desde fuera, y otra muy distinta cómo se vive desde dentro.
Por eso te recomendamos que contactes con profesionales de los sectores en los que estés valorando reinventarte, para conocer su punto de vista.
Pregúntales:
- Qué es lo que más les gusta de su trabajo (y lo que menos).
- Cómo es su día a día.
- A qué retos se tienen que enfrentar.
- Si es un sector con mucha demanda.
- Qué conocimientos son imprescindibles para trabajar en él.
- Qué consejos le darían a alguien que está empezando.
Hoy en día es muy fácil entrar en contacto con otros profesionales a través de LinkedIn o incluso grupos y perfiles de redes sociales.
👉 6. Si tienes dudas sobre una salida concreta, ¡pruébala!
Habrá casos en los que encuentres una profesión que te atraiga, pero no tengas del todo claro si esa podría ser tu auténtica vocación.
En estos casos, puedes:
- Asistir a charlas o eventos profesionales donde se hable del día a día de ese sector.
- Hacer cursos online para principiantes (los hay incluso gratuitos).
- Participar en talleres presenciales en tu ciudad.
- Entrar en una empresa con un contrato de prácticas.
Todo esto te servirá para descubrir si ese trabajo que estás considerando realmente te gusta y si puede ser tu camino. Además, también te permitirá entrar en contacto con profesionales en activo (y podrás hacerles las preguntas del apartado anterior).
Así, cuando llegue el momento de dar el salto y reinventarte, lo harás con mucha más seguridad.
Para terminar, vamos a dejarte un par de ejercicios que te sirvan para poner en práctica lo que hemos visto en el post.
Nuestro consejo: hazlos ahora mismo.
Así no caerás en la tentación de decir eso de «Ya los haré luego»… y acabar olvidándote de ellos.
Piensa que, al hacerlos, ya habrás dado el primer paso hacia tu profesión soñada. 😉
➡️ A. ¿Qué harías si el dinero no fuera un problema?
Tu vocación debe ser algo que harías aunque nadie te pagara por ello.
Y por eso este ejercicio es tan interesante.
Cierra los ojos e imagina que tus necesidades económicas estuvieran cubiertas y pudieras dedicarte a lo que sea, sin preocuparte por el dinero que ganas o dejas de ganar.
¿Qué harías?
¿Cuál sería esa actividad a la que te entregarías?
La respuesta te puede dar pistas sobre tu verdadero camino.
➡️ B. Ikigai, la técnica japonesa para encontrar tu propósito vital
Ikigai significa “razón de ser” en japonés y es un ejercicio muy utilizado para encontrar tu vocación.
Primero debes responder a estas preguntas:
- ¿En qué soy bueno?
- ¿Qué me apasiona?
- ¿Qué necesita el mundo?
- ¿Por qué estarían dispuestos a pagarme?
Escribe varias respuestas para cada una de las preguntas y luego analiza si hay alguna manera de conectarlas.
Por ejemplo, imagina que:
- Eres bueno con las finanzas.
- Te apasiona ayudar a otros.
- Además, sabes que mucha gente no tiene conocimientos financieros mínimos, y eso les genera dificultades en su día a día.
Podrías crear un curso básico de educación financiera para enseñar a personas que no saben cómo ahorrar o incluso que están en una situación de deuda.
Eso es probablemente algo por lo que mucha gente estaría dispuesta a pagarte.
✅ Ya tienes todo lo que necesitas para encontrar tu vocación en la vida
Pero… ¿recuerdas que te habías prometido algo?
Sí; al principio del post te dijimos que íbamos a darte una idea concreta para reinventarte si aún no has encontrado tu camino.
Pues esa idea es convertirte en Optimizer Manager.
El Optimizer Manager es una de esas nuevas profesiones digitales de las que te hablábamos antes. Su labor consiste en diseñar estrategias de captación de clientes online con Google para empresas.
Y es un perfil que tiene muchísimas ventajas para reinventarte y emprender, porque:
- Ayudas a las empresas a conseguir más clientes: esto lo convierte en un servicio muy valioso para tus clientes, y por el que puedes cobrar tarifas high ticket.
- Genera ingresos recurrentes: además de diseñar la estrategia de captación, el Optimizer Manager cobra una tarifa mensual por implementar esa estrategia y optimizarla. Así, en el momento en que consigues tu primer cliente ya tienes unos ingresos mínimos asegurados cada mes.
- Lo puedes aprender desde cero: el Optimizer Manager trabaja con un sistema paso a paso, el Método #TúPrimero®, que puedes aprender desde cero aunque no sepas nada de SEO ni de marketing digital.
Si quieres saber más, muy pronto vamos a lanzar la nueva edición de la Semana #GánateLaVidaConGoogle, nuestro training 100 % en el que te hablamos a fondo sobre esta nueva profesión y sobre todas las oportunidades que te ofrece.
Reserva tu plaza ya haciendo clic aquí y descubre si esta es tu verdadera vocación.
¡Nos vemos muy pronto!